Hay que experimentar ese sabor amargo, esa frustración, ese enojo y esa desilusión de no salir victorioso.
Saber perder genera muchísimas cosas buenas, por ejemplo es el primer paso para empezar a ganar. Los errores son mucho más detectables en el fracaso que en la victoria, muchas veces las mieles del exito nos empalagan y no permiten un análisis claro y objetivo. ¿Cuántas veces creemos que porque hemos ganado hemos hecho las cosas bien? Seguramente que si uno juega bien tiene mas oportunidades de ganar, pero aún ganando siempre hay cosas que corregir.
Lo mejor: "el comportamiento de los jugadores", de ambos equipos, los dos terminaron con el mismo número de jugadores con el que empezaron, lo siento por la prensa pero me alegro por todos esos "jóvenes" seguidores que les idolatran, eso es lo que realmente les deben de transmitir.
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